Algo similar ocurrió en su día cuando Tata reveló la variante ‘Euro’ del Nano, una adaptación necesaria de este producto para que superara las exigencias mínimas de la reglamentación a nivel de seguridad y emisiones del occidente Viejo Continente.
Para Estados Unidos se anunció que ocurrirá -de manera predecible- algo similar, pues del minúsculo precio de 1.500 dólares con el que uno puede encontrar el Nano más básico en India, el número podría aumentar a unos 8.000.
Las razones son simples, empezando por la incorporación de refuerzos en la estructura para que cumpla con las normas mínimas de seguridad en las vías norteamericanas.
El motor tendría que ser de un mayor tamaño para circular de una manera segura en un contexto como el de una autopista, en donde la velocidad promedio supera la máxima que puede alcanzar el Nano bicilíndrico, sumado a que necesitará sistemas anticontaminación mucho más modernos para cumplir con la cada vez más baja cuota de emisiones contaminantes exigidas.
Hoy viajamos hasta Napa Valley para asistir a la primera prueba de manejo la ...
